jueves, 4 de octubre de 2012

Poema 2

No es raro que te sientas así -de extraño- y que trates de remendarlo;
con suaves telas de olvido, y también de júbilo -que encuentras por ahí-
Son un poco precarias al principio -pero sabes como disimularlo- me gusta como lo haces.
Nadie sabe en realidad como lo haces, el mundo cambia y todos ustedes también lo hicieron;
y lo hicieron para mal. No giraron al mismo tiempo que La Tierra,
 la dejaron sola -está rodeada de solitarios- nadie merece la soledad,
más que el triste sauce -aquel gran hijo- que sabe como llevarlo a cuestas.
Encajarás con ese traje, que es especial, brilla a transformación y cambio.
Ya no caminas -porque no puedes- pero aún puedes nadar,
no es gratificante que mueras pero así es la vida,
soleada y diseña vestidos largos para que la niña los use;
y cuando crezca su carácter, le quede a medida.
Puede acompañarlo con un largo sombrero y una flor, pero no, aún no sabe,
como girar con La Tierra y sus hijos.